El ascenso de la pereirana Kali Uchis es una historia notable de compromiso artístico y de calidad estética que la ha llevado a ser, hoy por hoy, una de las representantes más importantes de los músicos nacionales dentro y fuera de nuestro país. Hace poco más de un mes nos dejó sorprendidos con su lenta y sensual presentación en el Festival Estéreo Picnic y a las pocas semanas estrenó su primer álbum de estudio, Isolation. Aunque ya conocíamos varios de los sencillos que lo componían (“Tyrant”, “Nuestro Planeta” y “After the Storm”), lo cierto es que el álbum nos tomó por sorpresa al ser uno de los productos más interesantes del nuevo pop mundial, una joya tallada con precisión y empeño que resplandece con elegancia y sofisticación.
Ayer la cantautora nos presentó un nuevo videoclip cargado de sensualidad nocturna en el que el cuerpo es el protagonista de un espacio lleno de alegorías y evocativas imágenes. El videoclip de “Get Up” es una mezcla de dos canciones que hacen parte de Isolation, “Get Up” y “Body Language”, la introducción del disco. Kali Uchis se sumerge en un imaginario cargado de objetos relacionados con la libido humana ataviada con poca ropa, repitiendo como un mantra que todo está en el lenguaje corporal. Con un erotismo que no raya en la obscenidad ni lo pornográfico, Kali Uchis logra construir un universo que orbita en torno al deseo y la calidez de los cuerpos. Dirigido por la música, el videoclip resulta supremamente evocativo y nos enfrenta a una artista integral que dirige cada una de las decisiones estéticas que circundan su arte.
“Me gusta poder empezar un proyecto con un momento fluido, misterioso y delicado; como una pluma recorriendo tu piel”, explicó la cantante sobre esta introducción a Pitchfork. “Es un coqueteo antes de que te sumerjas en todos estos sonidos diferentes. Siempre quise hacer una canción de bossa nova así es que le presenté esta canción a Thundercat y el produjo lo que la rodea. Mucho de lo que escribo es inconsciente, y eso es definitivamente lo que sucedió con “Body Language”: puse en un loop un sonido básico de bossa nova y empecé a cantar. Más que todo, trata sobre el escapismo. Quería que se sintiera como una canción libre”. Kali Uchis logra así incluir la influencia del bossa nova en su propia estética y el resultado es una obra de ensueño. Ya en 2015 la colombiana había explicado al periodista canadiense Nardwuar la importancia del género en su formación, principalmente la influencia de Astrud Gilberto: “Es genial. Ella como que no necesita llegar a la nota o tú ni siquiera necesitas entender qué dice para dejar que la música realmente te arrulle y es dulce y melódico, casi celestial. Me gustan las cantantes que son así, que no necesitan flexionar su voz, sino que son sofisticadas y te llevan. ¿Sabes a lo que me refiero?”. Vean aquí lo último de Kali Uchis y dejen que el arrullo de su voz los transporte a un mundo nuevo y sensual.
