Diamante Eléctrico lleva seis años de juiciosa carrera preparándose para ser una de las bandas centrales del rock nacional. Cuestionar en este momento su importancia en el panorama colombiano y latinoamericano es un sin sentido y cuestionar sus triunfos no tiene mucho valor a la luz de que cada disco, siempre, construye un sonido inteligente, refinado y que, sin alejarse de su género base, no teme colindar con otras estéticas para crear un producto siempre fresco y novedoso. El trío colombiano se ha parado en firme y ha logrado conquistar las tarimas más importantes del país, públicas y privadas, y el año pasado presentó quizás su mejor trabajo a la fecha: Buitres. El LP compuesto de nueve canciones representó un nuevo aire para una agrupación que se había caracterizado por un explosivo sonido de guitarra (poco antes Billy Gibbons de ZZ Top los había acompañado en un exitoso sencillo) y los llevaba a transitar momentos inquietantes, a empaparse de otros sonidos afro provenientes de los Estados Unidos y a jugar de manera minimalista sobre el pentagrama para construir melodías profundamente inquietantes.
Ahora, apostando por todo lo alto, la banda regresa con el primer adelanto de un álbum de colaboraciones de diez canciones. Buitres & Co llegará de manera quincenal, como una novela por entregas, y busca ampliar el horizonte de posibilidades de una banda que cada vez más le pierde el miedo a dejar en el ropero la chaqueta de cuero en aras de una experimentación sólida de las bases de su sonido. El disco se proyecto como la posibilidad de un proyecto de nutrirse de distintas fuentes y referentes, menos obvios en su sonido que la luenga barba de Gibbons, pero igual de interesantes para la construcción de una nueva identidad sonora. Buitres & Co tendrá colaboraciones del mundo del hip hop (Kase O.), el pop alternativo (Francisca Valenzuela) el post punk revival (Alison Mossheart), entre muchos otros. Por ahora, la banda estrenó el viernes pasado su primer adelanto de la mano del dominicano Vicente García, “Sólo tú, dueles”.
La canción abre con una mirada contemporánea de las interjecciones propias del góspel norteamericano para luego migrar a un sonido minimalista en el que la voz de Juan Galeano (vocalista y bajista de la banda) se abre paso sobre una bruma de guitarras y percusión a la 808. Para cuando la voz del dominicano se une al diálogo, la canción ha construido una estética bellísima y plena de tímidas reverberaciones que se suman a una producción delicada y elegante que nos muestra un Diamante Eléctrico como nunca habíamos percibido. La estructura lírica de la canción está compuesta por coros simples y, hacia el final, se suma un piano en clave de jazz que pronto se transforma en una atmósfera espaciada de sonido que ratifica las voces lejanas y en eco que le dan su calidad de bruma a la composición. Es un acierto en todo sentido.
Con “Sólo tú, dueles” Diamante Eléctrico explora fructuosamente un nuevo abanico de posibilidades y matices, ratificando su importancia en el panorama musical de Latinoamérica. La voz de García está mezclada de una manera que nunca conocimos y es un acierto para la producción última resultante. Seguramente, Buitres & Co será un álbum apabullante.
