Hablar de Semblanzas del rio Guapi implica, necesariamente, irse a lo más profundo de la selva del manglar para buscar la raíz acuática de un sonido cargado de historia. La banda, fundada hace más de una década, se ha convertido en una institución del Cauca configurada por más de una decena de músicos tradicionales que recurren a los sonidos del bambuco, la juga, el buga o el arrullo para seguir construyendo una historia de resistencia cultural en la que sobrevive el discurso de los primeros palenques solitarios de los cimarrones fugados, aquellos que tuvieron que encontrar un punto en común en sus discursos musicales al haberse confundido su ascendencia geográfica en todos los complicados procesos de colonización de nuestro territorio. Así, Semblanzas del rio Guapi se ha configurado como un acto de supervivencia discursiva cargada de una alegría resiliente y honesta que permite que la plétora cultural de nuestro país tripartita se mantenga viva a pesar de la influencia foránea de las músicas que vienen desde el mainstream global.
Voy pa’ allá, el primer álbum del conjunto editado a través del esfuerzo de Discos Pacífico, es un documento esencial del presente año que recoge 14 composiciones que la banda ha venido preparando desde el lanzamiento de Ay mi marimbita a onde ta de 2014. Recogiendo desde su nominación las formas discursivas del territorio, este juego de acentos y voces le da visibilidad a uno de los proyectos esenciales del Pacífico colombiano, una banda que ha aprendido a la fuerza a crear con sus propias manos el resguardo musical que habita. Caracterizada por la fuerza interpretativa de sus cuatro cantaoras, Semblanzas del rio Guapi es una de las agrupaciones esenciales de las nuevas músicas folclóricas colombianas, un proyecto que ahora y de manera afortunada podrá tener mayor difusión dentro y fuera de nuestro territorio.
Este disco, presentado el 16 de abril, ahora se complementa con el lanzamiento de un videoclip de factura potente que presenta con fuerza poética el territorio de Semblanzas. “Bogando” es el segundo corte de Voy pa’ allá y recoge las formas de la boga y la juga de la tradición pacífica. El primero nace de los cantos de navegación y de la actividad pesquera del Pacífico colombiano, utilizando el sonido del remo introduciéndose en el agua como patrón rítmico musical. La juga, también nacida a orillas del río, es un canto de celebración y conmemoración fúnebre con base de 6/8 propia del Pacífico colombiano, pero con una percusión más delicada en la que no solo los tambores tienen el protagonismo melódico. “Bogando” es una composición que recuerda las actividades pesqueras, la búsqueda de la piangua, y la relación primigenia entre el hombre y la naturaleza en plena comunión bucólica. Mientras tanto, el videoclip del corte nos introduce a las prácticas guapireñas, enseñando la cámara como testigo mudo el mundo rico en vegetación, ritmos y bailes de esta región del Cauca. Es un retrato de rica textura cromática que sirve como punto de presentación a la banda para quienes desconocían su existencia y un recordatorio de su fuerza heredada para quienes la han venido acompañando desde hace años.
