La dupla conformada por Franklin Tejedor y Julián Salazar es una fuerza natural que arrasa con la energía de un huracán y luego recoge los restos del naufragio con una cálida espuma marina. Después de abandonar definitivamente a Bomba Estéreo para concentrarse en Mitú, Salazar ha encontrado en Tejedor el socio perfecto para llevar a cabo este viaje astral que es el sonido hipnótico de Mitú. Dejando de lado su imponente puesta en escena (que es toda una experiencia por sí sola), lo que el dúo ha logrado construir en cada uno de sus álbumes no tiene par en la escena local o internacional. En 2019 la banda presentó TANDEM, su quinta placa discográfica y en los años pandémicos se encargó de ir soltando paulatinamente una serie de EP que continuaron su experimentación sonora hacia nuevas latitudes. Ahora la banda regresa con “Nene”, primer sencillo que anticipa su próximo álbum de estudio, luego de más de tres años sin presentar un trabajo de esta magnitud musical y conceptual.
“‘Nene’ es una canción que habla del punto de no retorno en el cual es innegable que estamos bajo la influencia de alguien, en que sentimos los trastornos generados por ese algo nuevo que ahora nos posee. Es una advertencia, un acto de fe al entregarnos sin condiciones”, explica Julián Salazar sobre este nuevo corte que fue grabado en su estudio de Santa Marta, ubicado en su domicilio particular. Al corte que presenta un extenso trabajo de guitarra influenciado por los sonidos caribeños del lado más psicodélico de la champeta se suma la voz de Yiset Pérez, quien había trabajado con la banda en “Volando”, incluido en TANDEM. Sobre la poderosa percusión de Tejedor se desarrolla un poderoso motivo de guitarra que se concatena con la atmósfera hipnótica en la que nos desdoblamos cuando nos enamoramos. Luego, solo a la mitad de la canción, las máquinas de Salazar convierten la voz de Pérez en un sample que implora el respeto y la reciprocidad mientras se convierte en un motivo armónico evocativo.
Acompañando el lanzamiento, la banda presenta un videoclip grabado en una colina en la periferia de San Basilio de Palenque, en el Bolívar, de donde es oriundo Tejedor. La vitalidad del deseo encarnado representado en vibrantes colores rojos con las que está ataviada la protagonista que reclama se contrapone a una calma atmósfera de calidez azulada que se desprende de los calmos cielos del Bolívar colombiano. Con “Nene” Mitú regresa con la promesa de un nuevo disco y las expectativas más altas para seguir con una promesa de valor que nos ha acostumbrado a sus escuchas a la excelencia sonora. Jugando con nuevos sonidos, la banda demuestra que está siempre dispuesta a reinventarse en función de la canción y en contraposición a la tendencia. Sus melodías precisas son la evidencia de un trabajo que sobresale siempre en nuestro ecosistema musical y son un ejemplo a seguir para todos los proyectos con estéticas similares por venir.
