Santander es tierra de refranes, de juegos de palabras, de retahílas y adivinanzas. Su música no es la excepción. De Cabuya a Malalma y Velandia, las últimas décadas han demostrado cómo para los santandereanos el lenguaje es materia móvil, que acomodan y con la que juegan a su antojo. Más allá del marcado acento con los que el resto del país caracteriza a los habitantes de esta región, lo cierto es que el lenguaje en Santander es lúdico, irónico, divertido.
Así es como llega Mija, banda conformada por Pablo Jiménez, oriundo de Bucaramanga. Jiménez había hecho parte, como líder, de la agrupación bumanguesa Benjamín, un ecléctico ensamble que alcanzó a llevar sus interesantes historias y su enloquecido sonido a las tarimas de Rock al Parque y el Festival Centro. Después de cuatro años de una especie de exilio musical, Jiménez regresa a los escenarios en forma de power trío. Mija, si bien formada en Bogotá, recoge la identidad de Jiménez en sus producciones que, más que un cantante, se convierte en una suerte de pregonero. La fusión de rock psicodélico con música tradicional colombiana como el fandango y el currulao convierten a Mija en un producto extraño y atractivo para el público nacional.
Hoy, viernes 11 de agostos, Mija estará dando un show para enseñar su pregón rock a los bogotanos en la Libélula Dorada. La ocasión también servirá para grabar su primera producción discográfica, titulada DEMOS en vivo en la libélula. Conozca el sonido de Mija y sea parte de la experiencia en vivo de su contundente ensamble. Quizás sus vivas y aplausos queden registrados en la cinta.
