Conjuro Epiléptico es una banda harto conocida en la escena alternativa bogotana que nació hacia mediados del 2015. Con un show lleno de disfraces, fuerza interpretativa y excesivas improvisaciones que llevan a los asistentes por un recorrido sonoro que se adentra por el hip hop, el punk, el funk, el jazz y el rock psicodélico de guitarra, la agrupación ha llegado a consolidarse como uno de los proyectos claves de la convulsa Bogotá. Peligrosísimo, pero siempre emocionante. Con Hodi, su álbum debut de 2017, el quinteto logró una difusión mayúscula en medios especializados y, durante todo el 2018, estuvo presentándose en importantes tarimas capitalinas junto a actos de la talla de Las Yumbeñas, ha$lopablito y Cirkus Funk (Cali). En 2019 la banda presentó dos álbumes, EPS Sanitas y Makial, un álbum en vivo con lo mejor de su música. La banda se ha convertido en uno de los proyectos de mayor alcance en la escena independiente de Bogotá y del resto del país, presentando una identidad variada en la que el único punto de unión es la creatividad y la posibilidad de construir cortes emocionantes que beben de varios puntos de partida para generar una propuesta única.
En 2020, después de un tributo en Manizales por parte de Conjuro Epiléptico a Nirvana y luego de que se decretase la cuarentena obligatoria por efecto del Covid-19, la banda empezó a trabajar en su tercer álbum de estudio, Conjuro epiléptico. Grabado en los estudios de la Superestación 88.9, la emisora de rock y pop más escuchada durante la década de los 80 y noventa, Conjuro Epiléptico asumió una nueva etapa creativa. A partir de la alianza con el colectivo Fronk y con Nicolás Pava, quien entonces vivía en la emisora, los miembros de la banda grabaron una serie de canciones que luego enviarían a Jack Endino, ingeniero de sonido de Bleach, el primer álbum de Nirvana, publicado en 1989. Por ello, su primer sencillo de esta nueva etapa, presentado hace un par de semanas, presenta remanentes de esta estética grunge que nació en Seattle.
“Melódicamente” es la primera parada de esta nueva etapa de la banda. "Es una travesía por el estado de confusión y ansiedad que casi todos hemos vivido en tiempos de pandemia, y una exploración absurda por los sentimientos de ansiedad que produce el encierro y la cuarentena" explica Nicolás Mejía, cantante de la banda. Con un riff circular que genera un estado hipnótico que nos lleva a la desesperación del encierro y la ansiedad de la repetición de los días, “Melódicamente” es un corte con reminiscencias a Temple of the Dog, Alice in Chains y el primer Soundgarden. La inteligencia lírica de Mejía construye una serie de imágenes sobre la monotonía de la cuarentena, la absurda necesidad de la positividad en momentos de crisis y las restricciones de circulación de la población en los espacios urbanos. Es un punto de inflexión inquietante para la banda, que presenta un nuevo sonido, más oscuro y menos explosivo, con su primer sencillo de su próximo EP. “Melódicamente” es todo lo mejor de Conjuro Epiléptico con la fuerza de una nueva y ansiosa estética que le suma a su sonido mucha fuerza y urgencia.
